Talento vs. Capital

La Batalla entre el Talento y el Capital

Lorenzo Vicens, Ph.D.

Cada día, en salones de conferencias, restaurantes y otros lugares, se libra una batalla milenaria entre el dueño del capital y el propietario del talento, sea este talento un concepto de una idea de negocios o el saber-hacer (know-how) de un negocio o proyecto. La batalla se libra para determinar la participación en los beneficios de cada parte.

En los países desarrollados, se habla de que ha pasado la era del capital, ya que se han acumulado tantos recursos financieros que los inversionistas buscan activamente oportunidades de negocios para tener mejores rendimientos de los que permiten los títulos financieros tradicionales. En países del tercer mundo, como República Dominicana, todavía el capital tiene la sartén por el mando y la mayoría de las veces, logra una participación desproporcionada.

Conozco casos de empresas que se han formado con la unión de una persona con el know-how y otra con el capital que han logrado un equilibrio en el medio de la escala: cincuenta-cincuenta, 50% para el que aporta el know-how y 50% para aquel que aporta el capital. También he tenido la oportunidad de conocer casos en que la idea de negocios no recibe participación y toda la distribución se hace de acuerdo al capital invertido por los socios.

Si alguna vez te encuentras en esta situación, te recomiendo que hagas un ejercicio, comparando los beneficios proyectados para diversos escenarios de financiamiento del negocio o proyecto. En el Escenario A, asume que todo será financiado pagando intereses, en el Escenario B, todo el dinero será aportado por inversionistas. La tasa de interés del Escenario A la puedes estimar, partiendo de la tasa de referencia de la banca, ajustada por una prima correspondiente al riesgo del proyecto.

De esta manera, puedes calcular los beneficios para diferentes combinaciones de estas dos variables y sobre todo, puedes determinar a que tasa de interés equivale la participación de los beneficios que estás cediendo al inversionista.

En la República Dominicana he notado un interés creciente en el talento con la creación de grupo de inversionistas ángeles/capital de riesgo y fondos de inversión dedicados a evaluar nuevos negocios; sin embargo, entiendo que todavía queda mucho terreno por recorrer, muchas puertas que abrir, muchas batallas que librar.

Espero que estas ideas generen muchos comentarios e historias de ambos lados del conflicto, juzgando por la cantidad de respuestas diferentes que he recibido de las personas con que he conversado sobre el tema.